Objetivos de la psicología: qué son y por qué son importantes

Al igual que otras disciplinas científicas, la psicología tiene como objetivo lograr un conjunto de objetivos en la investigación y la práctica.

La psicología es una disciplina científica dedicada a comprender el comportamiento humano.

A lo largo de la historia, el estudio del comportamiento humano se consideró inicialmente únicamente como una actividad filosófica. Sin embargo, en 1879 el profesor alemán Willhelm Wundt implementó la ciencia y el método científico en la disciplina de la psicología con la apertura del primer instituto psicológico en Alemania.

La psicología incluye cuatro objetivos o principios básicos que reflejan su propósito e intenciones: describir, explicar, predecir y modificar el comportamiento.

La psicología se considera una ciencia porque utiliza el mismo enfoque científico que otras ciencias, como la astronomía o la química, para ayudarnos a comprender el comportamiento humano.

Al igual que otras ramas de la ciencia, la psicología tiene como objetivo lograr una serie de objetivos en la investigación y la práctica:

  • describir el comportamiento
  • explicar el comportamiento
  • predecir el comportamiento
  • cambiar/controlar el comportamiento

Describir

El primer objetivo de la psicología es describir el comportamiento. Este objetivo pregunta «¿Qué está pasando?» o «¿Qué está haciendo este individuo?»

Este objetivo permite a los investigadores recopilar información y luego describir, nombrar y/o clasificar lo que ven. Al describir minuciosamente un fenómeno o comportamiento, los psicólogos pueden distinguir entre comportamientos típicos y atípicos. Describir es el punto de partida para dar sentido a las cosas.

Para lograr el objetivo de descripción, los investigadores pueden usar varios enfoques, que incluyen observación natural, encuestas, estudios de casos y pruebas de autoinforme.

Como ejemplo, un estudio observó los hábitos de Internet de niños y adolescentes, identificó sus patrones de uso y observó si los niños compartían esta información con sus padres.

Los investigadores encontraron que los niños y adolescentes pasaban un promedio de 3,1 horas al día navegando por la web. También observaron que los niños eran reacios a decirles a sus padres lo que habían buscado en Internet.

Una vez que los comportamientos han sido completamente documentados y descritos hasta el más mínimo detalle, los investigadores pueden usar esa información como punto de partida para explicarlo.

Explicar

Una vez que se ha descrito detalladamente el comportamiento, el siguiente objetivo es explicarlo. Explicar el comportamiento implica un intento de comprender cómo y por qué ocurre el comportamiento.

El objetivo de explicar ayuda a determinar por qué nos comportamos o reaccionamos de cierta manera, o cómo ciertos estímulos pueden afectar nuestra salud mental, personalidad o relaciones. Por ejemplo, ¿por qué escuchamos música o leemos libros? ¿Nuestras personalidades son principalmente el resultado de la crianza o de la naturaleza? ¿Qué hace que una persona arriesgue su vida por otra?

Un estudio de 2022 analizó los comportamientos de compartir de los niños y examinó si ciertas habilidades cognitivas podrían hacer que compartir sea más probable. Los investigadores encontraron que las habilidades de conteo de un niño eran, de hecho, el mayor predictor individual de comportamientos de distribución justa.

Entonces, los investigadores no solo observaron las habilidades de los niños para compartir, sino que también explicaron por qué algunos niños pueden haber compartido más que otros, porque, con sus habilidades de conteo, esencialmente pudieron contar los artículos para ellos y sus compañeros.

Predecir

El tercer objetivo de la psicología es la predicción. Una vez que los psicólogos han descrito un determinado comportamiento y explicado por qué sucede, pueden predecir mejor cómo y cuándo podría volver a ocurrir.

El objetivo de la predicción pregunta «¿Cuándo podría volver a ocurrir este comportamiento en el futuro?» o “¿Qué pasaría si respondiera de esta manera?”

Los investigadores pueden usar los datos que han recopilado de estudios anteriores para predecir cuándo, por qué y cómo ocurrirán ciertos comportamientos en el futuro. A través de la predicción, los psicólogos pueden comprender mejor las causas subyacentes de nuestras acciones.

Por ejemplo, generalmente entendemos que el alcohol puede hacer que algunas personas sean más agresivas. Con esta información, podríamos predecir que hay más peleas en los bares que sirven alcohol en comparación con las cafeterías. Los investigadores podrían tomar esta hipótesis y realizar un estudio para ver si es cierta.

La predicción exitosa es importante para el objetivo final en psicología: modificar el comportamiento.

Modificar el comportamiento

El cuarto objetivo de la psicología es modificar comportamientos que pueden ser dañinos, improductivos o interferir con el funcionamiento diario.

El objetivo del cambio pregunta «¿Cómo puedo dejar este hábito?» O “¿Qué puedo hacer para ser una persona más generosa?”

La psicoterapia es un ejemplo de este objetivo en acción. En la terapia cognitiva conductual (TCC), por ejemplo, identifica y cambia los patrones de pensamiento negativos y dañinos.

Este objetivo final puede ayudar a generar cambios positivos en la vida, como disminuir los comportamientos adictivos, reducir los síntomas depresivos o mejorar la comunicación.