Lucha de poder en las relaciones: señales, efectos y soluciones

Una lucha de poder se refiere a una competencia evidente o sutil en una relación por el control y la influencia. La dinámica del poder puede ser un punto de crecimiento o de ruptura.

No importa cuánto tengas en común con alguien, inevitablemente terminarás en desacuerdo en algo. Pero no es lo mismo estar en desacuerdo en un punto que luchar por el poder con tu pareja.

Las luchas de poder a menudo se manifiestan como un impulso para salirse con la suya en temas importantes donde las opiniones o visiones pueden diferir. Esto puede implicar ignorar la perspectiva o las necesidades de tu pareja, o cruzar los límites que ha establecido.

La lucha por la influencia y el control puede hacerse evidente al principio de la relación, pero en algunos casos, solo se convierte en un obstáculo cuando se discuten temas importantes que no se resuelven. Algunos de estos temas pueden incluir:

  • tener o no hijos
  • estilos de crianza
  • donde vivir o ir de vacaciones
  • como gastar y ganar dinero
  • creencias o practicas religiosas
  • cuestiones morales, políticas o éticas
  • opciones de estilo de vida

Además de las diferencias de opinión y perspectivas, las luchas de poder también pueden resultar de los desafíos emocionales de uno o ambos miembros de la pareja.

Los estilos de apego inseguro, por ejemplo, pueden llevar a alguien a renunciar a su influencia en asuntos importantes por miedo al abandono o al rechazo. Los trastornos de personalidad como la personalidad narcisista y la personalidad antisocial pueden hacer que alguien quiera ejercer control y poder sobre su pareja.

Solo un profesional de la salud mental puede determinar con precisión si un problema de salud mental es la causa subyacente de las luchas de poder no resueltas.

En cierto sentido, toda relación implica una dinámica de poder, pero no necesariamente una lucha.

Es natural no estar de acuerdo con tu pareja en algunos temas y querer que vea las cosas a tu manera. Pero estar en una relación comprometida puede implicar negociar cómo se satisfacen las necesidades de todos, lo que a su vez implica el compromiso de ambos socios.

Las luchas de poder normalmente no se convierten en un desafío si ambos socios entienden la necesidad de un compromiso.

Un estudio de 2021 con 181 parejas heterosexuales encontró que las diferencias objetivas en el poder no suelen afectar una relación, sino más bien cómo cada miembro de la pareja percibe estas diferencias y su nivel personal de poder.

Además, el estudio encontró que la dinámica de poder equilibrada se asoció con una mayor satisfacción en la relación, una mayor libido y un mayor bienestar emocional.

Reconocer posibles luchas de poder puede ayudarlos a usted y a su pareja a prevenir desafíos.

Algunos signos de luchas de poder en la relación pueden incluir uno o ambos socios que:

  • tener problemas para ver las cosas desde el punto de vista de la otra persona
  • tienen dificultad para comprometerse o llegar a acuerdos
  • involucrarse en comportamientos de control
  • recurrir a tácticas de manipulación
  • guardar rencor
  • no respetes los límites
  • sienten que no tienen voz ni voto en asuntos importantes de la relación
  • participar en comportamientos vengativos cuando las cosas no salen como ellos quieren
  • jugar a la víctima cuando se discuten desafíos importantes

Las habilidades de resolución de conflictos son esenciales para discutir temas importantes y llegar a una solución que funcione para ambas personas en la relación.

La escucha activa, la comunicación asertiva y la elección del amor todos los días también son importantes para prevenir y resolver las luchas de poder en una relación.

Otros consejos a considerar incluyen:

  • evitando emocionarse, especialmente dejando que la ira lo controle. Si la emoción comienza a vencerlo, intente respirar profundamente para volver a concentrarse.
  • recordar que su relación se basa en puntos en común, no en diferencias
  • descubrir lo que todos quieren y estar dispuesto a hacer concesiones
  • tratando de ser específico acerca de las expectativas
  • tratando de empatizar con tu pareja y viendo las cosas desde otras perspectivas
  • respetar las diferencias de opinión y validar el punto de vista de su pareja para asegurarse de que se consideren los deseos de todos

También es muy recomendable buscar el apoyo de un consejero de salud mental. Podrán explorar las posibles causas de sus desafíos y proponer mecanismos de afrontamiento efectivos.

Las luchas de poder pueden surgir cuando las parejas luchan por el control de una relación, no están de acuerdo en un principio básico o hay un desequilibrio objetivo en el poder.

Las luchas de poder no son inherentemente negativas. Encontrar formas saludables de resolver conflictos, aterrizar en un terreno común y llegar a un compromiso puede ayudar a fortalecer las relaciones.