Trastorno del procesamiento sensorial: la guía definitiva

¿Qué es el trastorno del procesamiento sensorial?

Con frecuencia se identifica que los niños con trastorno del procesamiento sensorial (SPD, por sus siglas en inglés) tienen problemas de comportamiento y/o emocionales, retrasos en el habla, dificultades de aprendizaje o dificultades de atención. Esto a menudo lleva a que a los niños se les diagnostique erróneamente o no se les diagnostique en absoluto un trastorno del procesamiento sensorial. Es importante que tanto los padres como los profesionales comprendan por qué un niño podría tener desafíos porque una de las causas principales puede ser la forma en que un niño procesa la información sensorial.

Los sentidos ayudan a los niños a interpretar y organizar su entorno, lo que luego les ayuda a responder adecuadamente a las situaciones. Cuando el sistema sensorial de un niño no funciona correctamente, el niño se siente abrumado porque no sabe cómo reaccionar ante las situaciones. Este trastorno puede ser muy complejo porque el sistema sensorial se compone de ocho sentidos y un niño con SPD puede tener múltiples sistemas sensoriales afectados a la vez.

¿Qué es un sistema sensorial?

Mucha gente piensa que el sistema sensorial se compone de cinco sentidos; sin embargo, el sistema sensorial se compone de ocho sentidos. A continuación se muestra una lista de los ocho sentidos que contribuyen al SPD:

1. Visual (vista) es la capacidad del niño para ver cosas como colores, formas, profundidad, iluminación y para escanear y filtrar información visual.

2. Auditivo (audición) es la capacidad del niño para oír, escuchar, filtrar y atender selectivamente a los estímulos auditivos. También afecta el habla y el lenguaje.

3. Táctil (tacto) es cualquier cosa que se pueda tocar y sentir en el cuerpo de un niño a través de sus receptores cutáneos.

4. Olfativo (olfato) es la capacidad que tiene un niño de oler si algo es bueno o malo. El sentido del olfato está conectado con las emociones en el cerebro y puede provocar sentimientos de comodidad y alarma.

5. Gustativo (gusto) es la capacidad del niño para determinar qué alimentos y/o bebidas le gustan y cuáles debe evitar. Es una forma que tiene un niño de decidir si es peligroso ingerir algo en función de si sabe bien o mal.

6. Vestibular (ubicado en el oído interno y ayuda al equilibrio) es la capacidad del niño para identificar cuando está sentado, acostado, boca abajo, de pie, girando, etc.

7. La propiocepción (sentidos de los músculos, articulaciones y ligamentos) es el sentido interno del niño que le permite saber dónde están las partes de su cuerpo “en el espacio” y qué están haciendo con ellas sin buscarlas.

8. La interocepción (sentidos de los órganos internos) es la capacidad del niño para identificar funciones internas como el hambre, la sed y cuándo ir al baño.

Causas de los trastornos del procesamiento sensorial

Aunque los investigadores han identificado que tanto factores genéticos como ambientales pueden contribuir a los problemas sensoriales, no se conoce la causa. Los niños que nacen prematuramente o los niños que tienen un trastorno del comportamiento o del desarrollo probablemente tengan problemas sensoriales. A menudo, a los niños a los que se les diagnostica un trastorno del espectro autista o ADD/ADHD también se les diagnostica un trastorno del procesamiento sensorial.

¿Puede un niño superar el trastorno del procesamiento sensorial?

Dependiendo de la gravedad del trastorno del procesamiento sensorial de un niño, es posible que lo supere o no con la edad. En casos menos graves, un niño puede tener un sistema sensorial subdesarrollado y, una vez que su sistema sensorial madura y se desarrolla, es posible que supere algunos de sus síntomas sensoriales. Sin embargo, para la mayoría de los niños diagnosticados con SPD, sus síntomas sensoriales duran toda la vida y nunca desaparecen por completo. Basado en el perfil sensorial de un niño y con intervenciones y modificaciones adecuadas, tendrá que aprender a desarrollar estrategias de afrontamiento para gestionar sus desafíos sensoriales a lo largo de su vida.

¿Cuáles son los signos del trastorno del procesamiento sensorial?

Dado que un niño con trastorno del procesamiento sensorial tiene problemas para organizarse y responder a la información que llega a través de sus sentidos, a menudo presentará uno de los dos síntomas que se enumeran a continuación:

1. Síntomas de hipersensibilidad (hipersensibilidad)

Estos niños evitan la información sensorial porque les resulta demasiado abrumadora. Reaccionan a una amplia gama de desencadenantes (algunos se enumeran a continuación) que pueden provocar una crisis sensorial:

  • Se asusta fácilmente y muestra miedo extremo ante sonidos y ruidos repentinos y fuertes (es decir, descarga de inodoros, aplausos de la multitud, simulacros de incendio, etc.).
  • Puede distraerse con ruidos de fondo que otros no escuchan.
  • Se siente fácilmente abrumado por la gente y los espacios abarrotados y busca lugares tranquilos.
  • Le molestan las luces brillantes.
  • Se siente incómodo con el tacto y a menudo evita los abrazos y las caricias.
  • Se niega a usar ropa incómoda o que le pica
  • Tiene una fuerte reacción a ciertos alimentos, olores o texturas y se niega a probar alimentos nuevos.
  • Se molesta por pequeños cambios en la rutina y por probar nuevas actividades.

2. Síntomas de baja sensibilidad (hiposensibilidad)

Estos niños buscan más información sensorial. Siempre están “en movimiento” y pueden buscar situaciones nuevas y novedosas. A continuación se muestra una lista de síntomas que pueden presentar los niños poco sensibles:

  • Tocar objetos constantemente
  • Se retuerce y se inquieta
  • Distraido facilmente
  • juega duro
  • Tiene una alta tolerancia al dolor.
  • Puede dañar a otros o a las mascotas porque no son conscientes de su propia fuerza.
  • Parece torpe o descoordinado al chocar con cosas.
  • Asume riesgos físicos que a veces pueden ser peligrosos y se le conoce como un “buscador de emociones fuertes”.
  • Invade el espacio personal de otros

¿Cómo diagnosticar el trastorno del procesamiento sensorial?

Son algunas evaluaciones y listas de verificación, como las Pruebas de praxis e integración sensorial (SIPT) y la Medida de procesamiento sensorial (SPM), que ayudan a determinar si un niño tiene un trastorno del procesamiento sensorial. El primer paso es cuando un padre o un profesional nota que un niño muestra los signos anteriores de SPD, debe programar una cita inmediatamente con un pediatra. Discuta los signos y preocupaciones con el pediatra y solicite una derivación para ver a un terapeuta ocupacional (OT) para que pueda evaluar y evaluar al niño para detectar un trastorno del procesamiento sensorial.

¿El trastorno del procesamiento sensorial afecta el aprendizaje?

Si bien el trastorno del procesamiento sensorial no es un trastorno del aprendizaje, los síntomas pueden impedir la forma en que un niño aprende en el aula. Por ejemplo, un niño con SPD que es hipersensible puede sentirse molesto por las luces del aula, los ruidos dentro del aula (es decir, niños hablando), sentirse incómodo con su ropa, puede enfadarse cuando hay cambios repentinos en la rutina del aula (es decir, una asamblea).

Además, los ruidos y olores en la cafetería del colegio también pueden resultar molestos para un niño con SPD. Un maestro no puede esperar que un niño aprenda un nuevo concepto matemático, escriba un párrafo o lea y comprenda un cuento si la etiqueta de la camisa del niño le produce picazón o las luces fluorescentes del aula son demasiado brillantes para sus ojos, o si escucha el El inodoro tiraba constantemente de la cadena fuera del aula.

Otro ejemplo es un niño poco sensible que puede tener problemas para quedarse quieto en un escritorio, tocar constantemente los materiales del aula y chocar continuamente con escritorios y sillas en los que su maestro puede considerarlo impulsivo. El niño poco sensible también puede tener problemas para hacer y conservar amigos porque es demasiado rudo cuando juega con sus compañeros, o puede tener problemas para permanecer quieto el tiempo suficiente para conversar con un compañero.

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Trastorno del procesamiento sensorial La guía definitiva

De todos modos, si un niño con SPD es hipersensible o poco sensible, esperar que funcione de siete a ocho horas al día en un entorno que desafía su sistema sensorial es prepararlo para fracasar en un entorno escolar. Sin embargo, con un diagnóstico adecuado, existen intervenciones, estrategias terapéuticas, juguetes, ropa y modificaciones que se pueden realizar para ayudar a un niño con trastorno del procesamiento sensorial a aprender a afrontar y organizar su sistema sensorial para que pueda aprender y prosperar con éxito en la escuela. ambiente.

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¿Cómo ayudar a un niño con Trastorno del Procesamiento Sensorial?

El sistema sensorial de un niño con trastorno del procesamiento sensorial se ve desafiado a diario. Dicho esto, es importante encontrar las intervenciones, estrategias terapéuticas, juguetes, ropa y modificaciones adecuadas para implementar para ayudar al niño a organizar su sistema sensorial. A continuación se muestra una lista de seis formas de ayudar a un niño con SPD a organizar su sistema sensorial:

1. La Terapia de Integración Sensorial es una terapia especializada implementada por un Terapeuta Ocupacional capacitado. Los niños en sesiones de terapia están expuestos a actividades estimulantes de los sentidos basadas en sus necesidades sensoriales. La OT trabaja y enseña al niño estrategias de afrontamiento mientras está expuesto a estímulos estimulantes. Las actividades se presentan de forma controlada, divertida y estructurada que permite al niño experimentar estimulación sensorial sin sentirse abrumado.

2. Dieta Sensorial es un enfoque de tratamiento en el que un Terapeuta Ocupacional diseña una lista de actividades físicas que un niño puede realizar a lo largo del día ya sea en casa o en la escuela. Estas actividades de dieta sensorial están diseñadas para satisfacer las necesidades sensoriales del niño y proporcionarle información sensorial. Las actividades pueden calmar (es decir, hacer flexiones de brazos en la pared, saltar en un trampolín) o despertar el sistema sensorial (es decir, rebotar en una pelota de yoga o en un columpio).

3. Sensory Room es una sala especialmente diseñada que combina una variedad de estímulos sensoriales. Las salas están diseñadas para ayudar a los niños con trastorno del procesamiento sensorial a participar y explorar con sus sentidos en un ambiente seguro y sin estrés. Estas habitaciones suelen tener luces tenues, sonidos y colores calmantes, aromaterapia y diferentes estímulos de juego que proporcionan diferentes entradas sensoriales. Los objetos de juego pueden incluir almohadillas protectoras, tubos de burbujas, cuentas de agua y columpios… sólo por nombrar algunos elementos.

4. Ejercicios para el trastorno del procesamiento sensorial Dependiendo de las necesidades de procesamiento sensorial del niño, existen innumerables ejercicios que un niño puede hacer para ayudarlo a organizar su sistema sensorial. Los ejercicios sensoriales son beneficiosos porque estimulan al cerebro a procesar información de manera más efectiva, ayudando así al niño a responder de manera más apropiada. A continuación se muestran algunos ejemplos de ejercicios que un niño con SPD puede hacer para centrarse en diferentes áreas de información sensorial:

  • Táctil: ejercicios que permiten al niño explorar y organizar su sistema sensorial a través del tacto. Ejemplos de ejercicios son llenar una tina con frijoles, arroz o perlas de agua y hacer que el niño meta las manos y/o los pies en la tina, jugar con crema de afeitar en una mesa y el protocolo de cepillado.
  • Vestibular: ejercicios que estimulan el sistema vestibular en el oído interno. Los ejercicios de ejemplo son cualquier ejercicio que estimule el sistema vestibular en el oído interno. Ejemplos de ejercicios son balancearse, rodar por el suelo o una pelota de yoga y andar en patinete boca abajo.
  • Propioceptivo: ejercicios que ayudan al niño a sentir sus músculos y articulaciones. Ejemplos de ejercicios son saltos de tijera, caminar en carretilla y juegos de palmas.
  • Motor oral: ejercicios que implican estimulación sensorial de la boca que incluyen labios, lengua y mandíbula. Ejemplos de ejercicios son masticar chicle, comer alimentos con diferentes texturas y sabores fuertes y ejercicios de soplar, como usar una pajita para hacer burbujas o tocar un silbato.

5. Los juguetes sensoriales son juguetes diseñados para ayudar a calmar a un niño con un trastorno del procesamiento sensorial. A continuación se muestra una lista de juguetes que son más adecuados para sistemas sensoriales específicos:

  • Visual: lámparas de lava, tubos de burbujas, cualquier juguete que se ilumine o gire.
  • Auditivo –…