Sé agua, amiga mía
El agua es equilibrio. Es por eso que la analogía de Bruce Lee “Be Water” es popular hasta el día de hoy. Su metáfora captura el equilibrio que todos necesitamos en nuestras vidas.
El agua no mira hacia la izquierda ni hacia la derecha. Simplemente se abre camino como puede. Se adapta, pero siempre persevera. Incluso en reposo, el agua sigue devorando lentamente su entorno. En Pensamientos sorprendentesLee amplió el breve clip grabado:
Sé como el agua que se abre paso a través de las grietas. No seas asertivo, sino ajústate al objeto y encontrarás una manera de rodearlo o atravesarlo. Si nada dentro de ti permanece rígido, las cosas externas se revelarán.
El agua es un juez lento. Pregunta: «¿Qué forma necesito tener?» Se adapta a cualquier cosa con la que esté en contacto, gota a gota. Sin embargo, sólo puedes hacer esa pregunta si llegas a cualquier situación con la mente vacía.
Vacia tu mente. Sea informe. Informe. Como el agua. Pones agua en una taza y se convierte en la taza. Pones agua en una botella y se convierte en la botella. Lo pones en una tetera y se convierte en la tetera. El agua puede fluir o puede chocar.
A pesar de no tener forma propia, a pesar de ser infinitamente blanda, el agua es uno de, si no el elemento más fuerte de la tierra. Puede gotear, puede fluir o puede hacer furor. Si el agua cae sobre una piedra durante un tiempo suficiente, la ahuecará. Si el agua forma una ola del tamaño de un rascacielos, puede aplastar un barco entero. El agua hace lo que sea necesario para seguir avanzando.
Puede parecer que el agua se mueve en contradicción, incluso cuesta arriba, pero elige cualquier camino que se le abre para llegar al mar. Puede fluir rápidamente o puede fluir lentamente, pero su propósito es inexorable, su destino seguro. Sé agua, amigo mío.
Gracias a su interminable acto de equilibrio, el agua siempre encuentra el camino de regreso a casa. Tarde o temprano, voluntad llegar al mar. Tú también deberías seguir fluyendo. Ten planes, pero no los fuerces en la vida.
La vida es impredecible. A veces, te arroja piedras en el camino. A veces se abre una nueva puerta. Cuando eres agua, estás listo para cualquiera de los dos. Pase lo que pase mañana, te adaptarás.
Cuando el universo diga «Sí», ve. Fluir cuesta abajo. Muévete rápido. Salto. Aprovecha el impulso, aprovecha la oportunidad y aprovecha al máximo tu ventaja.
Cuando el universo diga «No», escuche. Toma un camino diferente. Ajustar. Persista lentamente en lugar de fracasar espectacularmente.
Cuando llegue una crisis, reúna sus fuerzas. Forma una ola imponente. Y cuando el mar esté en calma, disfrute del crucero y disfrute de la vista.
Cuando eres agua, siempre estás exactamente donde debes estar.
Sé agua, amigo mío.