El estímulo antecedente se utiliza con frecuencia en niños con autismo. Puede ayudar a los cuidadores y maestros a comprender por qué puede estar sucediendo una conducta problemática y les permite moldear la conducta para que tenga un resultado positivo o negativo. El antecedente también es algo que precede a un comportamiento y, a veces, se lo denomina desencadenante. Esto puede ser en referencia a alguien o algo que acaba de suceder antes de que se produjera el comportamiento que provocó que ocurriera.
El estímulo antecedente puede ser positivo o negativo dependiendo de cuál desee que sea el resultado deseado. Por ejemplo, los estímulos antecedentes que son positivos pueden utilizarse para ayudar a motivar a las personas a tomar decisiones positivas. Los estímulos antecedentes que son negativos pueden ayudar a moldear los comportamientos de los individuos que eligen tomar una decisión que evitaría el estímulo negativo.
Analicemos más este tema para ayudar a los padres de jóvenes en el espectro que buscan aprender más.
¿Qué es un estímulo antecedente y en qué se diferencia de una consecuencia?
El estímulo antecedente se utiliza a menudo para referirse a una persona o evento que ha desencadenado una conducta o elección, mientras que una consecuencia es un refuerzo negativo que se recibe y que depende de una conducta problemática o de una mala elección que se haya tomado. Un estímulo antecedente negativo es diferente de una consecuencia negativa. Un antecedente negativo haría que un individuo tema una consecuencia si se actúa sobre el comportamiento o la elección. Una consecuencia es un castigo que recibes por una acción negativa que ya ocurrió.
Veamos algunos ejemplos. En la escuela, una consecuencia podría ser tener que faltar al recreo como resultado de no prestar atención a las instrucciones durante una lección. El estudiante tomó una mala decisión al no prestar atención y el castigo o consecuencia fue quedarse sentado y faltar al recreo mientras sus compañeros disfrutaban de su tiempo de juego. Por el contrario, una campana en la escuela que suena entre clases podría verse como un estímulo antecedente. Los profesores no tienen que hacer ni decir nada cuando suena el timbre para avisar a los estudiantes que se apresuren a llegar a la siguiente clase. Escuchar el timbre hace que los alumnos tomen la decisión positiva de apresurarse a la siguiente clase para llegar a tiempo. Los niños saben que si no llegan a clase a tiempo, se les marca como tarde. Ser marcado como tardanza es el estímulo antecedente. Si reciben un castigo como resultado de llegar tarde, entonces se convierte en una consecuencia o castigo.
Haga clic aquí para saber más
¿Cuáles son los dos tipos principales de estímulos antecedentes?
Los estímulos antecedentes pueden ser positivos o negativos. Cuando el estímulo antecedente es positivo, puede ayudar a motivar a un individuo a tomar mejores decisiones o adoptar un comportamiento más apropiado. El uso de esta práctica o teoría puede ayudar a mejorar las circunstancias del comportamiento tanto del niño como del adulto si el cliente es mayor. Por ejemplo, si un estudiante tiene dificultades en la escuela o la universidad y los padres ofrecen un estímulo positivo o un artículo preferido como recompensa por las buenas calificaciones, el estudiante establecerá una conexión entre la importancia de las buenas calificaciones y recibir una recompensa. En un intento por obtener los estímulos positivos, el estudiante se motivará a mejorar sus hábitos de estudio, buscar tutorías y poner énfasis en obtener una buena calificación.
Los estímulos antecedentes también pueden ser negativos para ayudar a reducir la aparición de conductas problemáticas. Por ejemplo, si un niño utiliza lenguaje negativo o grosero, el estímulo negativo podría ser quitarle o restringir el uso de su teléfono celular. El niño habrá demostrado que no está contento si pierde o le restringen el móvil. Por miedo a perder nuevamente el teléfono, el niño disminuiría o extinguiría el uso de palabras groseras o negativas.
¿Cuál es un ejemplo de estímulo antecedente?
Un ejemplo adicional de estímulo antecedente sería un maestro que les da a los estudiantes una marca en la pizarra por buen comportamiento y trabajo duro. Cada vez que el maestro iba a la pizarra para agregar una marca, todos los alumnos se quedaban callados y parecían estar trabajando duro con la esperanza de obtener una marca de verificación muy deseada de su maestro. Sin tener que decir una palabra, simplemente caminar hacia la pizarra hace que los estudiantes adopten comportamientos positivos. Las marcas de verificación tan deseadas se correlacionarían con un refuerzo positivo.
Resumen
El estímulo antecedente puede ser positivo o negativo y puede ser utilizado por padres y maestros para ayudar a modificar o cambiar la conducta problemática. Los estímulos positivos pueden motivar a niños y adultos a tomar decisiones positivas y adoptar comportamientos positivos. El estímulo negativo puede ayudar a disuadir malas decisiones y comportamientos desafiantes. El estudiante o niño no querrá recibir el estímulo negativo y se esforzará por tomar mejores decisiones para evitar tener que recibir el estímulo negativo o la consecuencia que acompaña al comportamiento.
Apoye la
Esperamos que hayas disfrutado de este artículo. Para ayudarnos a crear más información útil como esta, considere comprar una suscripción a la revista .